
Esta ofrenda será realizada por los niños y jóvenes de la hermandad, esperando que vengan acompañados de sus padres, y de flores para la Virgen que estará expuesta en el altar mayor del templo.
Al término de la Eucaristía, se iniciará una Cruz de Mayo en la casa de hermandad, con una 'caracolá' con precios populares, cuyos beneficios irán destinados a la restauración del manto de la dolorosa.